Poemas de Marta Miranda
Nació en Mendoza. Es poeta y gestora cultural. Publicó los libros de poemas Mea Culpa (Nusud, 1991), El Oleaje(Nusud, 1998), La misma piedra (Ediciones Del Dock, 2004), Nadadora (Bajo la Luna, 2008), El Oleaje y otros poemas, antología bilingüe (Ruinas Circulares, 2013), Antología (Cuadernos Amerhispanos, México, 2013), El lado oscuro del mundo (Bajo la Luna, 2015) . Entre otras, participó de las antologías de la Primera Bienal de Arte Joven, Buenos Aires 1989, Poetas Argentinos de Fin de Siglo II, Buenos Aires 1999, Ventanas, Madrid, 2000, Poetas Argentinas 1961-1980, Buenos Aires 2007, Animales Distintos: muestra de poesía de Argentina, España y México, Autores Nacidos entre 1960 y 1969, México DF, 2008, Poesía Manuscrita vol. 2, Buenos Aires 2009, La poésie au coeurs des arts, Éditions Bruno Doucey, Francia, 2014. Ha sido traducida parcialmente al francés, catalán, alemán, inglés y croata. Como gestora cultural coordina diferentes festivales internacionales de poesía y es directora, junto al escritor Ricardo Rojas Ayrala del VaPoesía Argentina – Festival Internacional.
Seis poemas de El lado oscuro del mundo (Ed. Bajo la Luna, 2015)
No recuerdo la sonrisa de mi padre
Aunque la enfermedad lo devoraba
siempre ponderé
la belleza de mi padre:
sus grandes ojos
sus manos alargadas
el aire irónico con que miraba el mundo
Desde su silla de ruedas
si alguien cometía una torpeza,
cosa frecuente dado el lugar
las circunstancias,
si me miraba en esas circunstancias
sonreía calladamente
yo tomaba ese gesto como una señal de bienvenida,
de ser parte de su mundo
Sin embargo
no recuerdo su sonrisa, digo,
lo material
de su sonrisa
¿Sus dientes eran amarillos
o parejos?
En el recuerdo
la sensación es de felicidad
pero la imagen congelada
al mirarme
es la sonrisa que ofrecemos al perro abandonado
que al cruzarnos en la calle nos sigue
mueve la cola, no nos muerde
Creo que es suficiente
con saber que mi padre sonreía
más allá del recuerdo
para poder creer en la regla de bondad
de todas las sonrisas
de todos los perros
de todos los padres de este mundo
Cenizas
Las cenizas del volcán
hicieron que todo
se convirtiera en sombra
estatua colosal
que iba esculpiéndose con lentitud
a cada respiro de la boca
Vos y yo
lo vimos por tv
igualmente
y aunque lejos
a miles de kilómetros de allí
una nube espesa
entró en la casa
cubrió la foto
de tu cara junto a la mía
y allí quedó
la ceniza, el gris
el peso de las cosas
nos ahogaron
hasta volvernos sombra
Axis mundi
Oscura
la noche vive en tu corazón
que no me ama
a cambio
me ama tu sexo
y él me da la miel de todas las abejas
aunque no me ames
está en mí
la razón de tu órbita
porque soy
la porción del mundo
que nunca
podrás ser
la caverna
oscura y húmeda
el ojo de agua
que te mira
y te revela
Duda
Mi vida cabe en dos bolsas
dijo el asesino cuando lo trasladaban
al corredor de la muerte
Miro el bolso pequeño
que preparé para ir a verte, me pregunto
qué tuve que matar
para hacer este viaje
Postal
Quizá sea el momento
de tener una casa, un hogar un perro que nos lama
8estampita
del álbum familiar lejos del centro tuvimos una casa postal imperfecta faltó siempre
el animal doméstico
Nieve
Hace días que el mundo es otro: llueve en esta parte del mundo y el aire es caldo
sensación de una cosa
que subiendo por la tráquea enmudece, deja
la lengua como un charco
Hace días que llueve y me gustaría saber si va a parar
y no lo sé
porque clavado en la pantalla
aparece siempre el pronóstico de la ciudad donde estás
(Espacio)
Grados temperaturas nubecitas de colores,
hoy
y durante toda la noche
copos blandos empezaron a ocultar tu casa si sigue así
mañana tendrás que palear la nieve para poder salir
Aquí
la lluvia cesa y sale el sol
ruge como venido del infierno
una bocanada caliente y húmeda que nada logra sofocar
(Espacio)
Apuro el trago
dejo un hielo en la boca y en la lengua estalla
tu parque nevado
Que la nieve del mundo se lleve este ardor